Nuestra Institución, cuya filosofía está fundamentada en la Educación de la Fe Católica, orienta a los estudiantes en la preparación y formación de la infancia misionera, como parte de su procesos escolar y pedagógico. ¿Pero que conocemos de la infancia Misionera?; A continuación, una reseña de su importancia:
«Infancia Misionera es una Obra del Papa, que promueve la ayuda recíproca entre los niños de todo el mundo. En esta obra los niños ejercen como pequeños misioneros y son protagonistas de la Evangelización. Infancia Misionera da a los niños un papel protagonista en el servicio misionero: ellos son los agentes, donantes y receptores de la tarea misionera. Con el lema “Los niños ayudan a los niños” Infancia Misionera es una escuela de fe y de solidaridad.
Hoy son millones de «pequeños misioneros» distribuidos en parroquias, escuelas y movimientos de los cinco continentes.
En concreto, la Obra Pontificia de la Infancia Misionera se propone:
- Ayudar a los educadores a despertar progresivamente en los niños una conciencia misionera universal.
- Ayudar a los niños a desarrollar su protagonismo misionero.
- Mover a los niños a compartir la fe y los medios materiales, especialmente, con los niños de las regiones y de las Iglesias más necesitadas.
- Promover las vocaciones misioneras.
- Integrarse en la pastoral de conjunto de la educación cristiana, a la que aportará su proyección misionera.
Para realizar sus objetivos, la Infancia Misionera está prestando dos servicios a los niños: el primero y principal, la educación misionera; el segundo, la cooperación misionera a los niños más necesitados y a las misiones del mundo entero.
Así, la Obra Pontificia de la Infancia Misionera o Santa Infancia, que es Obra de la Iglesia universal y de las Iglesias locales, está animando y formando misioneramente a los niños (hasta los 14 años de edad, inclusive) y a sus educadores para que vivan en comunión eclesial misionera y para que realicen su misión local y su cooperación misionera a la evangelización universal, especialmente de los niños.
Los niños y niñas de la Infancia Misionera, acompañados por sus animadores, se proponen ser misioneros en su comunidad y ayudar a los niños del mundo entero. Son amigos de Jesús y hacen amigos para Jesús.
Los educadores, padres de familia, catequistas jóvenes, religiosas y sacerdotes, pueden participar en esta Obra como animadores de la Infancia Misionera. Los animadores ayudan y orientan a los niños, dejando que ellos asuman las responsabilidades que les corresponden y acompañándolos para que realicen todo lo que ellos mismos deben realizar.
La Iglesia universal pide a todas las Instituciones y Movimientos eclesiales colaborar con la Infancia Misionera en su vida y servicio a los niños del mundo entero».
Tomado de: http://www.vatican.va/roman_curia/congregations/cevang/p_missionary_works/infantia/documents/rc_ic_infantia_pro_20011106_profile-part-1_sp.html