Nació en Subachoque (Cundinamarca, en Colombia), el 15 de septiembre de 1900
y fue bautizado el primero de noviembre del año 1900.
Realizó sus primeros estudios en la misma población de Subachoque, fue alumno
de los Hermanos de las Escuelas Cristianas en la escuela Normal que dirigían en
la capital, allí cursó todos sus estudios de secundaria hasta obtener el título de
Institutor, logrando sobresalir por sus dotes de inteligencia, virtudes y su
consagración al estudio.
Inició la carrera de magisterio como subdirector de un colegio en el Tolima, luego
como director, aunque por poco tiempo porque pronto fue nombrado inspector
escolar para ese mismo departamento.
En 1924 ingresó al Seminario Mayor de Bogotá decidido por la vocación sacerdotal
que desde niño lo inquietaba. En 1928 recibió la unción sacerdotal de manos del
Excelentísimo Señor Nuncio Apostólico Pablo Giobbe.
En 1945 fundó las Religiosas de la Comunicación Social, cuyo grupo inicial fue de
14 jóvenes, quienes dieron continuidad a la obra del fundador y hoy en día la
comunidad está extendida en cuatro países: Colombia, Venezuela, Ecuador y
Panamá dando a conocer el carisma del Instituto comunicando fiel y sencillamente
el Evangelio.
La vida del Padre Emilio fue una jornada de grandes méritos, porque supo lanzarse
con firmeza y rectitud, sirviéndose de la oración, el amor y el sacrificio a la Divina
voluntad, fundamento de toda perfección.
El padre Emilio supo sufrir y soportar todo en abnegado silencio, vivió siempre la
virtud de la paciencia, la fe, el amor y la caridad, proyectando en su vida la figura de
San Francisco de Sales, el Santo de la bondad y de la mansedumbre.

Un día para Celebrar….